Vamos a ver como te lo explico. Tengo una tienda de camisetas, pero en realidad no es una tienda porque no gano nada, solo la satisfacción de que te gusten los diseños y puedas presumir con ellos. No, no te van a salir gratis, porque los impresores tienen que ganar su dinero y para eso trabajan. Yo no, tuve una empresa de diseño pero ahora estoy retirado y no estoy interesado en ningún negocio. Ultimamente practico con mis programas favoritos porque me gusta y además hago diseño para asociaciones humanitarias, para amigos, para grupos que lo pasan mal (siempre de modo altruista) y porque colecciono camisetas que son de diseño propio y que no las tenga nadie, al menos en la zona donde vivo. Como verás, no solo diseño camisetas.
Aunque las adapto todas, hay algunas que no se venden porque no las he diseñado yo y las tengo aquí porque sencillamente me gustan, pero respeto escrupulosamente los derechos de autor.
La tienda la tienes en "Obesia - La tienda" y también en Facebook.
Si te gustan me alegraré.

Selección de imágenes de diferentes artistas que me llamaron la atención por su creatividad.

Muchos ya sabéis que en el Facebook  suelo poner cada día, (algunos no) lo que llamo “IMAGENES Y DATOS INTERESANTES”. Son imágenes que me gustan y al parecer a vosotros también, pues por eso, para que no se pierdan, voy a ir poniéndolas aquí. ¡Ah!, y la mayoría ni las he puesto, no porque sean malas como comprobarás, sino porque tengo demasiadas. Espero que las disfrutes.

Selección de carteles y portadas realizadas con muy buen diseño gráfico.

La publicidad y ante todo el diseño gráfico es otro modo de creatividad e ingenio que va más allá de los anuncios de detergentes y cosas por el estilo. Y vamos a intentar demostrarte el por qué esa publicidad no tiene por qué ser un coñazo. (Aquí no encontrarás carteles o portadas de discos relativos a la música, eso está en nuestra sección "El mundo de la música".) Que lo disfrutes.

Colección de imágenes sobre ángeles y demonios
Sus sonidos eran apacibles y su respiración acompasada a los latidos de su corazón, se deslizaba con lentitud por entre las enredaderas de pino, su ala estaba manchada de sangre y bañaba su inmaculada piel blanca. Emitió un gruñido, al tiempo que se dejo caer sobre la maleza, cerrando sus ojos, dejando que el ensordecedor ruido de la batalla se perdiera en el infierno y que solo el sonido del viendo se escabullera con él.